La estacion invernal se caracteriza por el alejamiento…
Elemento Tierra y el verano tardio
Se denomina verano tardío al periodo intermedio entre el verano y el otoño, esa época del año en la que notamos que el verano empieza a declinar, y sin embargo, todavía no ha comenzado el otoño y el clima suele ser todavía apacible. Los días se notan más cortos y comienza a refrescar.
Entre estación y estación hay un periodo de unos 18 días llamado dojo en el que también está activa esta energía, la energía del elemento tierra. Es un periodo de parada en el que todo se reorganiza.
En este periodo entre verano y otoño, podemos sentir como la naturaleza comienza a replegarse, a calmarse, a disminuir su actividad. También nosotros, pasada la actividad estival nos vamos relajando, centrándonos, quedándonos más dentro.
En esta época, todavía podemos obtener alimento de la tierra, es momento de recoger las últimas frutas, que son además las más dulces, pues han acumulado toda la energía del sol. Ese sabor dulce es el que debe predominar en nuestra alimentación durante este periodo.
A nivel anímico, la tierra nos conecta con nosotros mismos. Dejamos de estar tan activos como en verano y comenzamos a estar más relajados e incluso melancólicos pues notamos que la energía expansiva del verano se acaba. Es momento de comenzar a mirar hacia dentro.
En esta época del año, necesitamos centrar, calmar y estabilizar nuestro organismo. Es importante comenzar a reducir los alimentos que han prevalecido en nuestra dieta durante el verano: frutas y verduras crudas, bebidas frías… Comenzando a introducir alimentos más nutritivos y templados que nos ayuden a reforzar y remineralizar nuestro organismo, creando el centro y la fuerza necesaria para afrontar los meses del futuro invierno.
Corresponde al Bazo, Páncreas y Estómago, es una buena época para tratar enfermedades relacionadas con estos órganos y prestarle más atención y cuidados